El Papa acaba de confirmar su confianza en su Secretario de Estado, Mons. Tarcisio Bertone, quien ha sido víctima de los ataques más arteros en el último tiempo. Dios los guarde a los dos por muchos años.
Sin embargo, si las cosas siguen siendo como son en este mundo sucio y podrido, ya hemos visto antes mil veces que tras un homenaje y respaldo de este calibre viene una digna renuncia y retiro por parte del desgastado y leal servidor. Ojalá que no suceda así, al menos no tan penosamente, pero cumplo con decirlo a los pocos lectores de este diario de bitácora, para que luego no se escandalicen.
Misterium Ecclesiae!
No hay comentarios.:
Publicar un comentario