Marta se duele del mal lenguaje que he adquirido desde que abandoné Alemania. Y tiene razón. Allá escribía en español; aquí, en medio del debate, en el lenguaje que pueda hacer no ya pensar sino escandalizarse un poco a los más sensibles, especialmente a los que todo lo toleran y se erigen en jueces de los intolerantes.
A ver si logro bajar los decibeles de vez en cuando, en honor a mis lectores más moderados.
Acepto opiniones y críticas, pero, por favor, que no sean anónimas.
A ver si logro bajar los decibeles de vez en cuando, en honor a mis lectores más moderados.
Acepto opiniones y críticas, pero, por favor, que no sean anónimas.
Muchas veces es necesario ciertas claridades que el lenguaje políticamente correcto no permite y sí lo hace el ser malhablado, diferente de maldiciente, jeje
ResponderBorrarSiga así no más.
ResponderBorrarAlberto
Los jueces caídos - ya sean morales, legales, políticos, etc- son más sabrosos para el apetito público...por una simple razón, permiten demostrar al resto de los mortales que no hay seres inmaculados, y que la lucha contra lo corrupto nunca termina.
ResponderBorrargracias Cristóbal!
ResponderBorrarah! dear Alemamá
ResponderBorrar"el lenguaje políticamente correcto no permite y sí lo hace el ser malhablado",
pienso que es exactamente al contrario:
no ser políticamente correcta implica NO ser mal hablada/o, o más bien, no decir lo que en cl se llama garabatos... Pienso yo...
Saludos!
Yo procuro no decir garabatos EN GENERAL; pero sí imito a algunos escritores que usan lenguaje fuerte, con intención de dar un ambiente y producir un efecto. Así, por ejemplo, en el post donde me referí a diversos olores . . . y otras cosas que no son garabatos, aunque sean malsonantes a propósito.
ResponderBorrarbueno, pero mierda es sí un garabato... yo sé que los espanoles no lo consideran como tal, pero no podemos convertirnos en una colonia mental de Madrid...
ResponderBorrarpienso yo, aunque me temo que ya esté sucediendo...
Un abrazo Cristóbal!