Me van a perdonar, pero llevo sangre anticlerical en las venas. Vamos a ejercer de vez en cuando el deber y el derecho de opinar sobre las tonterías que algunos buenos curas hacen circular en público, a ver si cuidan más la lengua. Vamos a personificarlos solamente en el CBH o Cura Buena Honda, y siempre, a cada uno, para no herir ni difamar, lo voy a ningunear, como hacía Gonzalo Vial, para que nos centremos en el argumento y no en la persona.
Leed al CBH, consolador de mujeres sensibles:
-¿Y qué sucede con la fe? En momentos tan trágicos parece siempre peligrar entre algunas personas. ¿Qué se les dice a ellas?“Es muy difícil esta pregunta, porque mucha gente se la cuestiona y seriamente; ‘¿por qué Dios nos mandó esto? ¿Por qué a mí? ¿Dónde estaba Dios en ese momento del terremoto y del tsunami?’. Y son preguntas que naturales, pero es precisamente ahí que la fe nos ayuda a entender que, en primer lugar, Dios no tiene nada que ver con esto. Él no envía este tipo de cosas, porque si hiciera eso, yo por lo menos, no le habría entregado ni un segundo de mi vida. Porque ese sería un Dios castigador, enjuiciador, horrible, un monstruo de Dios, y eso al final termina siendo una caricatura, y Él no es así. El Dios que se nos ha revelado en Jesucristo es el del amor, el de la misericordia, el que nos perdona, el que está con nosotros y vive con nosotros”.-¿También ha estado presente en el terremoto?“Claro que lo hemos visto en esta catástrofe, en los miles de héroes anónimos que salvaron vidas, en los miles de voluntarios que todavía están en las regiones ayudando a remover los escombros y a reconstruir lo que está dañado, en la solidaridad de cada chileno y chilena que ayudó en esta emergencia. Allí está Dios y sabemos que es amor y dolor también, porque murió crucificado y conoce muy profundamente el sufrimiento humano. Por eso confiamos en que nos va a dar la fuerza y nos va a ayudar. Pero no hay que confundir que Dios puede actuar interviniendo en un terremoto para darnos algún ejemplo, porque eso no lo hace Dios. Aquí hay una explicación científica que enseña perfectamente el fenómeno que vivimos”.
Es una tontería decir que "Dios no tiene nada que ver con esto". Dios es Todopoderoso y es ridículo pensar que no podría haber evitado el terremoto. Podía haberlo evitado y no lo hizo. Decir que Dios no se vale de las causas naturales para transmitirnos su voluntad, para hacernos pensar y reaccionar, es negar algo básico del cristianismo: detrás de cualquier acontecimiento, nos parezca bueno o malo, está de alguna manera la Voluntad de Dios.
La Mano de Dios no estuvo solamente en la conversión del doctor Nathanson, sino también en el gol de Maradona. Nada sucede sin que Dios lo quiera o lo permita.
Él quiere decirnos algo, movido por su infinito amor y misericordia.
El mismo CBH dice:
Padre, ¿tiene algún vicio privado?“Me gustan mucho los vinos y, por lo tanto, estudio mucho el tema; me compro libros, encuentro fascinante su mundo. No soy ningún experto de nada, pero me gusta. Cuando viví en Italia me compré libros para conocer los vinos italianos, los vinos españoles...”.-¿Es de estas personas que beben todos los días una copa?“Sí”.-¿Sólo una?“A veces más de una (sonríe)”.
Bien, fantástico: sonrisa de CBH. Quizás podríamos estudiar un poco más de doctrina católica, y un poco menos sobre vinos. Y tomar más de una dosis de Sagrada Escritura. Y adentrarse en la Carta Salvifici Doloris, ya recomendada.
Está lleno de curas buena onda, como el de reñaca (que tiene armado todo un negociado), o el berríos, o el mismo tupper, a quien se alude. Y bueno, quizás el más paradigmático, y tristemente célebre, es el Tato.
ResponderBorrarLa característica de todos ellos, es como bien se dice, la "buena onda loco". Son de los que se ponen a conversar con los jóvenes y les hablan del carrete, y algunos se hacen los lindos con las minas. Pero su característica común, es que se creen dueños de la verdad.
Leí la entrevista al CBH de que hablas. Lo que más me dolió al leerla es la falta de doctrina que se aprecia en sus palabras.
ResponderBorrarTe quiero contar una anécdota de un cura muy bueno que conozco. Le hablé de la encíclica Caritas in Veritate. Me respondió que no la había leído y eso que había pasado ya tiempo desde su publicación.
Otro cura (que no parece cura) me dijo que se había pegado una prédica a capela y que el Espíritu Santo lo había "tomado" y había predicado no sé cuánto rato. Perdón, pero no le creo nada. Para mí es pura verborrea. Parece que hay sacerdotes que se fían demasiado de las "inspiraciones" y poco de la lectura y del estudio.
Gracias por tu columna porque yo no me atrevo a hacer un crítica justa a ese tipo de conductas clericales.
Ojo: el título de "cura buena onda" es marca registrada, que yo no uso; el mío es el "cura buena honda", y lo dejo en el misterio así.
ResponderBorrarAl anónimo le digo que me parece mal que él dé nombres sin dar el suyo. Cobarde. Yo firmo.
yo no encuentro tan malo lo que dice!
ResponderBorrarevidentemente que lo que quiere decir es que Dios permite el mal, pero no lo envía como un castigo, que es lo que creen tantos...
evidentemente, tomar vino no es un vicio ;) sino una virtud :) Si yo me enojara cada vez que me dicen -en Alemania que soy viciosa porque fumo y tomo whisky y cola cola... Es que la gente lo ve como un vicio...
evidentemente tienes razón, pero no lo tomaría tan al pie de la letra :)
Saludos Cristóbal!
Álvaro, entonces, regálale tú la encíclica ;) pero con una sonrisa :)
ResponderBorrarMarta: la apologética fácil es lo que más daña al cristianismo. Así, a la crítica anticristiana de que creemos en un Dios que solamente castiga, un monstruo, etc., no se debe responder con un Dios que no castiga, un viejito choro que salva milagrosamente a algunos -los que no mueren en un terremoto-, y le damos gracias, porque el corolario para cualquiera con dos neuronas es que el mismo viejito no salvó milagrosamente a los otros -los muertos-. Por eso, me remito a la explicación más racional y matizada de un envío precedente.
ResponderBorrarEstimada Marta:
ResponderBorrarMuchísimas gracias por tu consejo.
Saludos,
Alvaro Astaburuaga G.
Quisiera retractarme de mi comentario (el segundo). No me gusta hacer críticas, pues no me siento con autoridad para hacerlas. Me gusta intentar argumentar bien, sin descalificar a nadie.
ResponderBorrarDesde ya gracias por vuestra comprensión.
Cordiales saludos,
Alvaro Astaburuaga G.