Páginas

domingo, septiembre 29, 2013

Siempre se cumplen nuestras profecías

Los conservadores no somos pesimistas. Simplemente profetizamos lo que ocurrirá si se abre la mano en la redefinición del matrimonio, cuya primera apertura fatal fue haberlo separado de su identidad religiosa. Y se han cumplido, hasta ahora, TODAS nuestras profecías. Solamente lo niegan quienes son víctimas o parte de ese cumplimiento (por ejemplo, creen que no se cumplió la profecía de degradación moral de la sociedad, porque ellos aceptan esa degradación).

Ahora llega a Chile la propuesta del "poliamor". Y se intenta suavizar la brutalidad que significa.

Leed.

‘Poliamor’, la tendencia de tener varias relaciones paralelas consensuadas

¿Se puede amar a dos o tres personas a la vez? Bueno, en España, algunos ya siguen ese camino.

Emol
Vi. 20 de septiembre de 2013, 08:01
¿Te atreverías a tener dos relaciones simultáneas y abiertas? ¿Crees que es una opción para evitar infidelidades? ¿Es posible disfrutar del amor libre? ¿Sí o no?

Es que en el amor y las relaciones, al parecer, no hay límites. Se dice que es el lugar más fértil y creativo para desplegar todos nuestros gustos, placeres y la identidad de quienes somos a la hora del amor.

Sin embargo, para algunos el ser monógamo es una condición poco natural y muy estricta. Y, para no serlo, la opción que encontraron, sin ser infieles ni vivir bajo el engaño, es el poliamor.

Una manera de amar famosa en Estados Unidos durante los ’60, pero que también fue la forma de amar de las escritoras Anaïs Nin y Simone de Beauvoir, el filósofo Bertrand Russell y el poeta inglés Shelley.

Lo “antiguo” hoy vuelve a renacer pero está vez es en España, según anunció el periódico La Vanguardia. No es una tendencia generalizada pero si una opción de vivir en “pareja” para una minoría.

“El poliamor se basa más en el amor que en el sexo y sus partidarios consideran que este sentimiento no tiene que estar restringido. Porque si quieres a alguien deseas lo mejor para esa persona, y eso incluye permitirle ampliar su vida amorosa y sentimental”, explicó María Pérez Conchillo,  presidenta de la Academia Española de Sexología y Medicina Sexual al diario.

Sostiene que este tipo de relaciones acepta mantener vínculos emocionales con otras personas, de forma duradera y con más de una. Pero, aunque suene extraño, la relación no pasa necesariamente por la sexualidad, porque lo peculiar del poliamor, es que no se trata de una orgía, ni intercambio de parejas. Es “amor”.

“No importa su identidad sexual. Puede darse entre mujeres, hombres o transexuales. La única condición es el amor entre ellos y la aceptación de la relación por parte de todos. Lo sexual, si bien está presente, pasa a un segundo plano, lo que se busca es la intimidad”, detalla.

A juicio de la especialista, es un amor “normal”, más socializado, donde no hay engaños sino simplemente sinceridad y permiso para compartir con otra persona desde el amor, la confianza y la entrega. No son aventuras express.

¿Es normal?

El poliamor, por tanto, es la capacidad de elegir de vivir el amor de un modo distinto, múltiple y libre. Tal vez, uno que es menos aceptado y muy cuestionado por los conservadores defensores de la monogamia o la poligamia, donde los contratos son sociales y establecidos.

“Claro, acá no hay obligaciones legales, pero para nosotros el peligro del poliamor es que es una respuesta infantil a la dinámica de una familia infantilizadora”, explican los terapeutas de pareja y familia, Michelle Cordovero y Camilo Estay.

Es decir, comentan que habría una carencia afectiva tal, en cada uno de los integrantes de esta relación, que por eso aman en varios niveles y roles.

“Todo lo que no me dieron en mi núcleo familiar lo repito con esta gente como padres, hermanos y amantes, y con una identidad sexual indefinida. Diríamos que es una respuesta a la precaria exploración de lo que significa ser pareja”, definen.

Por lo tanto, para ellos es la búsqueda de una familia ideal, en respuesta a una familia de origen inoperante que los llevó a buscar una contención emocional incondicional de una forma “diferente”.

¿Es amor?

Los terapeutas lo dudan porque este tipo de relaciones libres se experimentan cuando se viven crisis personales e inmadurez afectiva y sobre todo, porque una relación de pareja se vive de a dos, en respeto, exclusividad, fidelidad y en conciencia.

“Cuando aparece un tercero que sostiene las carencias que los otros dos no pudieron resolver y ninguno de los integrantes podrá crecer con vínculos seguros, completos y amorosos”, alertan.

Al contrario, de lo que se usa en el poliamor donde no hay celos ni sentimientos posesivos frente a la persona amada. Se deja libre, para que haya un diálogo abierto, sincero y honesto con el acuerdo establecido.

Diversos tipos

A pesar de la libertad de este amor y las bondades que pudiera tener, La Vanguardia precisa que no hay estadísticas aún de la práctica de relaciones poliamorosas. Sin embargo, sostiene que éstas tienden a durar menos, ya que el poliamor es una corriente contracultural.

Como si no fuera suficiente, encontramos que el amor libre también tiene otras variantes. ¿Cuál te gustaría practicar?

Poligamia: Una persona se casa con varias esposas (poliginia) o varios esposos (poliandria).

Polifidelidad: Existe una fidelidad establecida entre los miembros del grupo de poliamor.

Relación monopoliamorosa: Cuando un miembro de la pareja es monógamo y los demás no.

Relación grupal: Los miembros se relacionan abiertamente unos con otros. No hay acuerdo en cuanto a la exclusividad.

Relaciones conexas: Cada persona puede tener varias relaciones con diversos grados de importancia. Amor libre, libre.

Clan o tribu: El amor se da mediante redes complejas entre sus miembros, en base a una cuestión de identidad y cultural.

Caridad, superar la espiral del mal

He asistido a injusticias y odios promovidos por gentes de izquierda y de derecha y de centro. El mal, como el bien, es transversal a las opiniones políticas. A una de las personas afectadas solamente pude limitarme a recordarle lo que tantas veces hemos compartido: no hay solución fuera de la Caridad de Cristo.

Es el mensaje de siempre. El Papa no se cansa de repetirlo. Lo hace otra vez en el Ángelus del domingo.

Leed. De Radio Vaticana, 15 septiembre 2013:

Queridos hermanos y hermanas. ¡Buenos días!
En la Liturgia de hoy se lee el capítulo 15 del Evangelio de Lucas, que contiene las tres parábolas de la misericordia: la de la oveja perdida, la de la moneda perdida, y después la más amplia de todas las parábolas, típica de san Lucas, la del padre de los dos hijos, el hijo “pródigo” y el hijo que se cree justo. Que se cree santo.
Todas estas tres parábolas hablan de la alegría de Dios. Dios es gozoso, es interesante esto, Dios es gozoso, y ¿cuál es la alegría de Dios? La alegría de Dios es perdonar, ¡la alegría de Dios es perdonar! Es la alegría de un pastor que encuentra a su ovejita; la alegría de una mujer que encuentra su moneda; es la alegría de un padre que vuelve a recibir en casa al hijo que se había perdido, que estaba como muerto y ha vuelto a la vida. Ha vuelto a casa.
¡Aquí está todo el Evangelio, aquí, eh, aquí está todo el Evangelio, está el Cristianismo! ¡Pero miren que no es sentimiento, no es “ostentación de buenos sentimientos”! Al contrario, la misericordia es la verdadera fuerza que puede salvar al hombre y al mundo del “cáncer” que es el pecado, el mal moral, el mal espiritual. Sólo el amor llena los vacíos, los abismos negativos que el mal abre en el corazón y en la historia. Sólo el amor puede hacer esto. Y ésta es la alegría de Dios.
Jesús es todo misericordia, Jesús es todo amor: es Dios hecho hombre. Cada uno de nosotros, cada uno de nosotros es esa oveja perdida, esa moneda perdida, cada uno de nosotros es ese hijo que ha desperdiciado su propia libertad siguiendo ídolos falsos, espejismos de felicidad, y ha perdido todo.
Pero Dios no nos olvida, el Padre no nos abandona jamás. Pero es un Padre paciente, nos espera siempre. Respeta nuestra libertad, pero permanece siempre fiel. Y cuando volvemos a Él, nos acoge como hijos, en su casa, porque no deja jamás, ni siquiera por un momento, de esperarnos, con amor. Y su corazón está de fiesta por cada hijo que vuelve. Está de fiesta porque es alegría. Dios tiene esta alegría, cuando uno de nosotros, pecadores, va a Él y pide su perdón.
¿Cuál es el peligro? Es que nosotros presumimos que somos justos, y juzgamos a los demás. Juzgamos también a Dios, porque pensamos que debería castigar a los pecadores, condenarlos a muerte, en lugar de perdonar. ¡Entonces sí que corremos el riesgo de permanecer fuera de la casa del Padre! Como ese hermano mayor de la parábola, que en lugar de estar contento porque su hermano ha vuelto, se enoja con el padre que lo ha recibido y hace fiesta. Si en nuestro corazón no hay misericordia, la alegría del perdón, no estamos en comunión con Dios, incluso si observamos todos los preceptos, porque es el amor el que salva, no la sola práctica de los preceptos. Es el amor por Dios y por el prójimo lo que da cumplimiento a todos los mandamientos. Y esto es el amor de Dios, su alegría, perdonar. Nos espera siempre. Quizá alguien tiene en su corazón algo grave, pero he hecho esto, he hecho aquello, Él te espera, Él es Padre. Siempre nos espera.
Si nosotros vivimos según la ley del “ojo por ojo, diente por diente”, jamás salimos de la espiral del mal. El Maligno es astuto, y nos hace creer que con nuestra justicia humana podemos salvarnos y salvar al mundo. En realidad, ¡sólo la justicia de Dios nos puede salvar! Y la justicia de Dios se ha revelado en la Cruz: la Cruz es el juicio de Dios sobre todos nosotros y sobre este mundo. ¿Pero cómo nos juzga Dios? ¡Dando la vida por nosotros! He aquí el acto supremo de justicia que ha vencido de una vez para siempre al Príncipe de este mundo; y este acto supremo de justicia es precisamente también el acto supremo de misericordia. Jesús nos llama a todos a seguir este camino: “Sean misericordiosos, como su Padre es misericordioso” (Lc 6, 36).
Yo les pido una cosa ahora. En silencio, todos, pensemos, cada uno piense, en una persona con la que no estamos bien, con la cual estamos enojados y que no la queremos. Pensemos en esa persona y en silencio en este momento oremos por esta persona. Y seamos misericordiosos con esta persona.
Invoquemos ahora la intercesión de María, Mater Misericordiae.

(María Fernanda Bernasconi – RV).

Amistad cívica

Carta el pasado domingo 15 de septiembre. Yo tengo mis opiniones agradecidas a la liberación del totalitarismo comunista, cuyas masacres en todo el mundo conocemos, y estas opiniones no van a cambiar por el descubrimiento de que los servicios de seguridad de Chile, como los de prácticamente cualquier otro lado, cometieron crímenes abominables. Una verdad no anula la otra.

Sin embargo, nada de eso autoriza continuar con la espiral del odio y la violencia.

Leed.

Cartas
Domingo 15 de septiembre de 2013

Amistad cívica

Señor Director:

Más de un estudiante me sorprendió, el pasado 11 de septiembre, con una tristeza no habitual en mí, y se atrevió a decírmelo. Era verdad. Comparto la explicación.

Supe de algunos estudiantes que han dejado de hablarse, de saludarse, por sus visiones encontradas sobre el 11 de septiembre de 1973. Recordé entonces, a estos censores de mi justa pena, que, entre los compañeros de curso de 1984 en la UC, aun cuando sostuvimos apasionadas discusiones sobre la situación política de la época, mucho más tensa y violenta que la actual, nunca dejamos de saludarnos, de estudiar o jugar juntos, de reír y de tomarnos el pelo.

Muchas veces me encontré en el almuerzo con quien había estado, en esos días de protestas (a las que yo, sobra decirlo, no adhería), corriendo frente a huanacos y hasta lanzando piedras. Quiero poner a todos los compañeros de entonces como testigos de que la espiral del odio y de la rabia puede detenerse: se detuvo hace muchos años, entre muchos de nosotros.

Los que teníamos ocho años para el 11 pudimos. Algunos que tenían 18 o 21 (lean las columnas de Roberto Ampuero y Eugenio Tironi) también pudieron. ¡Estudiantes de hoy, amigos míos jóvenes que no habían nacido, ustedes también pueden cortar ese lastre, sin renunciar a sus legítimas convicciones éticas y políticas!

Cristóbal Orrego Sánchez
Profesor de Derecho UC

domingo, septiembre 22, 2013

Cura santo

Que no nos cuenten cuentos sobre qué quiere decir el Papa cuando llama a salir a las calles, a las periferias, a buscar a las ovejas.

Carta para la beatificación de un cura argentino que se dedicaba a visitar a sus ovejas, con la predicación, los sacramentos y la ayuda fraterna.

Leed.



LETTERA DEL SANTO PADRE FRANCESCO AL PRESIDENTE DELLA CONFERENZA EPISCOPALE ARGENTINA IN OCCASIONE DELLA BEATIFICAZIONE DI PADRE JOSÉ GABRIEL BROCHERO


Pubblichiamo di seguito la Lettera che il Santo Padre Francesco ha fatto pervenire al Presidente della Conferenza Episcopale Argentina e Arcivescovo di Santa Fe, S.E. Mons. José María Arancedo, in occasione della cerimonia di Beatificazione di padre José Gabriel Brochero (el Cura gaucho - il sacerdote gaucho) (1840-1914), che ha luogo oggi a Villa Cura Brochero, in Argentina, presieduta dal Card. Angelo Amato, Prefetto della Congregazione delle Cause dei Santi:


  • LETTERA DEL SANTO PADRE 


  • Excmo. Mons. José María Arancedo
    Arzobispo de Santa Fe
    Presidente de la Conferencia Episcopal Argentina
    BUENOS AIRES




  • Querido hermano:
    Que finalmente el Cura Brochero esté entre los beatos es una alegría y una bendición muy grande para los argentinos y devotos de este pastor con olor a oveja, que se hizo pobre entre los pobres, que luchó siempre por estar bien cerca de Dios y de la gente, que hizo y continúa haciendo tanto bien como caricia de Dios a nuestro pueblo sufrido.
    Me hace bien imaginar hoy a Brochero párroco en su mula malacara, recorriendo los largos caminos áridos y desolados de los 200 kilómetros cuadrados de su parroquia, buscando casa por casa a los bisabuelos y tatarabuelos de ustedes, para preguntarles si necesitaban algo y para invitarlos a hacer los ejercicios espirituales de san Ignacio de Loyola. Conoció todos los rincones de su parroquia. No se quedó en la sacristía a peinar ovejas.
    El Cura Brochero era una visita del mismo Jesús a cada familia. Él llevaba la imagen de la Virgen, el libro de oraciones con la Palabra de Dios, las cosas para celebrar la Misa diaria. Lo invitaban con mate, charlaban y Brochero les hablaba de un modo que todos lo entendían porque le salía del corazón, de la fe y el amor que él tenía a Jesús.
    José Gabriel Brochero centró su acción pastoral en la oración. Apenas llegó a su parroquia, comenzó a llevar a hombres y mujeres a Córdoba para hacer los ejercicios espirituales con los padres jesuitas. ¡Con cuánto sacrificio cruzaban primero las Sierras Grandes, nevadas en invierno, para rezar en Córdoba capital! Después, ¡cuánto trabajo para hacer la Santa Casa de Ejercicios en la sede parroquial! Allí, la oración larga ante el crucifijo para conocer, sentir y gustar el amor tan grande del corazón de Jesús, y todo culminaba con el perdón de Dios en la confesión, con un sacerdote lleno de caridad y misericordia. ¡Muchísima misericordia!
    Este coraje apostólico de Brochero lleno de celo misionero, esta valentía de su corazón compasivo como el de Jesús que lo hacía decir: «¡Guay de que el diablo me robe un alma!», lo movió a conquistar también para Dios a personas de mala vida y paisanos difíciles. Se cuentan por miles los hombres y mujeres que, con el trabajo sacerdotal de Brochero, dejaron el vicio y las peleas. Todos recibían los sacramentos durante los ejercicios espirituales y, con ellos, la fuerza y la luz de la fe para ser buenos hijos de Dios, buenos hermanos, buenos padres y madres de familia, en una gran comunidad de amigos comprometidos con el bien de todos, que se respetaban y ayudaban unos a otros.
    En una beatificación es muy importante su actualidad pastoral. El Cura Brochero tiene la actualidad del Evangelio, es un pionero en salir a las periferias geográficas y existenciales para llevar a todos el amor, la misericordia de Dios. No se quedó en el despacho parroquial, se desgastó sobre la mula y acabó enfermando de lepra, a fuerza de salir a buscar a la gente, como un sacerdote callejero de la fe. Esto es lo que Jesús quiere hoy, discípulos misioneros, ¡callejeros de la fe!
    Brochero era un hombre normal, frágil, como cualquiera de nosotros, pero conoció el amor de Jesús, se dejó trabajar el corazón por la misericordia de Dios. Supo salir de la cueva del «yo-me-mi-conmigo-para mí» del egoísmo mezquino que todos tenemos, venciéndose a sí mismo, superando con la ayuda de Dios esas fuerzas interiores de las que el demonio se vale para encadenarnos a la comodidad, a buscar pasarla bien en el momento, a sacarle el cuerpo al trabajo. Brochero escuchó el llamado de Dios y eligió el sacrificio de trabajar por su Reino, por el bien común que la enorme dignidad de cada persona se merece como hijo de Dios, y fue fiel hasta el final: continuaba rezando y celebrando la misa incluso ciego y leproso.
    Dejemos que el Cura Brochero entre hoy, con mula y todo, en la casa de nuestro corazón y nos invite a la oración, al encuentro con Jesús, que nos libera de ataduras para salir a la calle a buscar al hermano, a tocar la carne de Cristo en el que sufre y necesita el amor de Dios. Solo así gustaremos la alegría que experimentó el Cura Brochero, anticipo de la felicidad de la que goza ahora como beato en el cielo.
    Pido al Señor les conceda esta gracia, los bendiga y ruego a la Virgen Santa que los cuide.
    Afectuosamente,
    Vaticano, 14 de septiembre de 2013
    FRANCISCO

  • Esclavas, feministas y esclavas

    Abre los ojos. Un blog católico habla fuerte y claro, para quienes no lo quieran ver.


    Jueves, 19 de septiembre de 2013

    El Burka Ideológico

    ¿Cuál es la función del burka? Forzar a la mujer para que cumpla el rol que la sociedad le ha asignado. ¿Y cuál es esa función? La del sometimiento al hombre. Afinando más, la esclavización sexual. Puesto que en el Islam la mujer es “propiedad” (sobre todo sexualmente) exclusiva del hombre con quien se ha casado o ha sido casada, cuando sale de casa ha de estar preservada de las miradas de cualquier otro hombre, para que ni con la mirada y el deseo sea puesta en riesgo esa propiedad. He ahí la función del burka. Recordemos nuestro noveno mandamiento: “No desearás la mujer de tu prójimo”. El solo deseo pone en alto riesgo el orden establecido.

    Lo esencial del burka es que marca ostensiblemente la condición de esclava sexual de la mujer musulmana. Es la ostentación de su servidumbre sexual: sin el menor rubor. En el régimen del burka sólo están libres de esa prenda las mujeres que no son de nadie o que son de todos. Ahí es evidentemente el hábito el que hace al monje. Vestidas así, no hay ocasión para la infidelidad: es decir para el asalto a la propiedad sexual de alguien. La imposición del burka fue la fórmula que arbitraron los talibanes (más ostentosamente en Afganistán, donde conquistaron el poder político) para asegurarse de que las mujeres se comportarían sexualmente como había decidido que se comportasen el poder político-religioso.

    En nuestras latitudes tenemos también un poder político que se postula cada vez más como poder también religioso, empeñado en imponerles a las mujeres la conducta sexual que deben seguir. En este caso el mecanismo de imposición no es una prenda de vestir, sino una educación sexual.

    ¿Y cuál es el objetivo de esa educación sexual? Pues el mismo que el de los talibanes: conseguir que la mujer se comporte como una esclava sexual. La única diferencia es que en el caso de los islamistas, se piensa en una esclava sexual individual (de un solo hombre); mientras que en nuestro sistema educativo, se educa a la mujer para que sea esclava sexual genérica (aquí sí que “de género”), abierta por tanto a la colectivización.

    Es que como nuestro sistema es básicamente ideológico (eso es lo que venden los partidos políticos, ideología: hoy, “de género”), el poder político (que además, previa  aniquilación de la religión ha ocupado el espacio del poder religioso) ha establecido una serie de dogmas sobre los que construir esa esclavitud sexual de la mujer.

    Primer dogma: Fomento por todos los medios de la libertad sexual. Y puesto que la arcaica fidelidad coarta la libertad sexual, el Estado educa a las adolescentes inculcándoles la idea de que la fidelidad es enemiga de la libertad: de este modo prepara el terreno para la más generosa promiscuidad.

    Segundo dogma: El amor es el peor enemigo de la libertad sexual. Por eso ha sido extirpada de la educación impartida por el Estado a las adolescentes, cualquier alusión al amor.

    Tercer dogma: El bajo nivel de disponibilidad y de actividad sexual es síntoma evidente de una enfermedad gravísima, la frigidez, manifestación inequívoca de la ancestral represión sexual que sufrieron las mujeres y ha dejado huella. No se lo pierdan, es una “enfermedad de la conducta”. Señal inequívoca por tanto, de falta de libertad sexual de origen patológico, que debe ser tratada por tutoras, psicólogas, psiquiatras, psicoanalistas, internistas, sanadoras y lo que haga falta. Se trata de la peor enfermedad que puede padecer una mujer en la gloriosa era de la libertad sexual. ¿Qué tal?

    Con estos tres monumentales y sacrosantos dogmas que imparte sobre todo el cuerpo de talibanas del sistema educativo (¿tan resabiadas las ha dejado la opresión sexual han sufrido?), y con las facilidades que pone a su alcance el sistema sanitario (consejeras sexuales para curar la frigidez, pastilla del día después y aborto a la carta) nuestras adolescentes no necesitan burka ni nada que se le parezca para cumplir con el rol sexual que les tiene asignado el sistema.

    ¿Y cuál es ese rol? ¡Pues ya ven! El mismísimo que tienen asignado en los regímenes talibanes las mujeres musulmanas: el de esclavas sexuales Pero con una diferencia de poca, poquísima significación a la hora de las valoraciones globales, y sobre todo a la hora de determinar qué gana y qué pierde la mujer en uno u otro régimen. Y es que en el régimen del burka indumentario, se le impone a la mujer la servidumbre sexual con respecto a un solo hombre; mientras que en el régimen del burka ideológico (el de los tres dogmas impartidos en la escuela en régimen de pensamiento único), se le impone igualmente a la mujer la servidumbre sexual; pero en lugar de hacerlo respecto a un solo hombre, esta servidumbre sexual es colectiva (nada nuevo bajo el sol), y distinto el estatus de la mujer: es toda la colectividad masculina la que se beneficia de esa educación que presiona tan fuertemente a la mujer en orden a la disponibilidad sexual. Ése es nuestro burka ideológico. Cierto es que entre los dos regímenes de esclavitud sexual deja mucha más escapatoria el régimen colectivo.

    ¡Y no me digan que no conlleva sacrificios para la mujer esa pesada vestimenta con que la inviste el sistema educativo! El desbarajuste emocional de un sexo diseñado para que no tenga más gratificación que la meramente sexual, es de enormes proporciones. Como diseño masculino, se entendería perfectamente; pero jamás como diseño femenino (que no es lo mismo que feminista). Especifico el valor con que uso los términos: femenino significa “propio de la mujer”; mientras que feminismo es “lo que se refiere a la politización e ideologización de la condición de mujer”, y feminista el que se atiene a esos enfoques.

    Digo que esos sacrificios que se le imponen a la mujer, que alcanzan su punto álgido en el sacrificio del aborto, dolorosísimo tanto física como psíquicamente; esos sacrificios impuestos a la mujer en última instancia para optimizar su disponibilidad sexual, tienen sentido sólo si son fruto de un constructo social masculino inequívoca y ferozmente machista, destinado a incrementar su disponibilidad sexual hasta donde sea posible sin llegar a la violencia física.

    He nombrado lo innombrable: la violencia física empleada para arrancarle a la mujer la prestación sexual. Pero es exactamente ahí donde estamos. El Estado está sumamente preocupado por la violencia sexual, siempre machista. ¿Ven con cuánta solicitud lleva la cuenta de los asesinatos “de género”, es decir sexuales?) Y sabe que ésta se produce por la presión desproporcionada de una demanda insatisfecha. El Estado providente, en aras de la paz social, hace todo lo que puede por reducir esta explosiva presión, enseñando a las mujeres a ser más obsequiosas con los hombres. Las educa para que compitan con éstos en demanda de sexo. Si se consiguiese ese desiderátum educativo, la violencia sexual desaparecería como por ensalmo: porque ya no serían los hombres los que corriesen tras las mujeres en demanda de sexo, sino éstas tras los hombres: los árboles corriendo tras los perros. En eso están.

    Ya ven, el adoctrinamiento que antaño les transmitían las madres a las hijas previamente al matrimonio, ahora se lo transmite el Estado maternal a todas las adolescentes. Toda buena madre le explicaba a su hija que la paz de la casa se labraba en la cama. Que si la mujer no era capaz de tener contento y satisfecho al marido, los problemas no pararían de crecer hasta llegar a la violencia en el peor de los casos: a tomarse él por la fuerza lo que ella no le daba de grado; y sin que esta solución a la brava aportase apaciguamiento. Por eso, les razonaban las madres a las hijas, siendo el peor disparate construir la vida matrimonial sobre esas tensiones, lo mejor era prevenir y adelantarse a los deseos del marido. Y encima para ir a buscar fuera de casa lo que se le niega en casa. Pues ya ven, es lo mismo que hace hoy el Estado con todas las adolescentes. Sumamente preocupado por el gravísimo problema de la violencia sexual, ha decidido adoctrinarlas para que aporten lo mejor de sí mismas en la solución de este monstruoso problema.

    El Estado sabe, como las madres de antaño, que el tono anímico de los ciudadanos varones será muy distinto según que estén satisfechos o insatisfechos sexualmente. Por eso mira por sus hombres y procura (a costa de reeducar para ese rol a la mujer) tenerlos lo más satisfechos sexualmente, y por tanto lo más sosegados y contentos posible. Pero eso sí, siempre a costa de sacrificar a las mujeres. Cambian las formas, pero no el fondo.

    Todos los partidos políticos saben que las políticas encaminadas a ese gran objetivo devengan muchos votos. Incluso de las mujeres: porque éstas, la servidumbre sexual la tienen ya asumida y descontada. Saben que sólo tienen dos fórmulas: o el burka que les impone la servidumbre sexual bajo un solo hombre (de ése se cuidan las religiones), o el burka ideológico del pensamiento único bajo el epígrafe de “libertad sexual” (de este otro se cuida el Estado). Se trata del intensivo lavado de cerebro educativo que les impone la máxima actividad sexual posible para satisfacer en el mayor grado posible a los hombres de su entorno.

    ¿Y la libertad sexual de verdad? ¡Ah!, ¿pero es realmente posible la libertad sexual de la mujer? ¿Es compatible y puede coexistir con una auténtica libertad sexual del hombre? La solución, mañana. 

    Virtelius Temerarius

    domingo, septiembre 15, 2013

    Papa Emérito: casi siempre callado

    Benedicto XVI ha asumido con naturalidad su retiro de oración por la Iglesia, pero no como si hubiera muerto. El Papa Francisco lo convenció de que lo acompañara a inaugurar la estatua de San Miguel Arcángel, hace unos meses. Ahora, el gran teólogo reaparece con una breve homilía para sus discípulos.

    Del blog de Sandro Magiter, leed.


    Lampi di genio. Un’omelia extra di Joseph Ratzinger

    Postato in General il 2 settembre, 2013 ravenna
    Il professor Joseph Ratzinger ha rinunciato, quest’anno, a prender parte all’annuale seminario estivo dei suoi ex allievi di teologia che si è tenuto a Castel Gandolfo sul tema “La questione di Dio sullo sfondo della secolarizzazione” alla luce della produzione filosofica e teologica di Rémi Brague.
    Ma il 1 settembre ha celebrato con loro la messa, nella cappella del Governatorato, non lontano dal monastero nel quale risiede, sul colle Vaticano.
    Era la XXII domenica del tempo ordinario, anno C, dove nel Vangelo di Luca (14, 1.7-14) Gesù dice: “Va’ a metterti all’ultimo posto… perché chiunque si esalta sarà umiliato, e chi si umilia sarà esaltato”, e: “Quando offri un banchetto, invita poveri, storpi, zoppi, ciechi; e sarai beato perché non hanno da ricambiarti”.
    Ecco qui di seguito come Ratzinger ha commentato queste parole di Gesù nell’omelia, secondo il resoconto che ne ha fatto la Radio Vaticana.
    *
    Ognuno nella vita vuole trovare il suo posto buono. Ma qual è veramente il posto giusto? L’omelia di Benedetto XVI nella messa celebrata in occasione dell’incontro dei suoi ex-allievi è, in fondo, una risposta a questa domanda e parte dal Vangelo di oggi, nel quale Gesù invita a prendere l’ultimo posto.
    “Un posto che può sembrare molto buono può rivelarsi per essere un posto molto brutto”, nota il papa emerito facendo riferimento a quanto accaduto già in questo mondo, anche negli ultimi decenni, dove vediamo come “i primi” sono stati rovesciati e improvvisamente sono diventati “ultimi” e quel posto che sembrava buono era invece “sbagliato”. Anche nei discorsi che si tennero durante l’Ultima Cena, i discepoli si litigano i posti migliori. Gesù si presenta invece come Colui che serve. Lui “nato nella stalla” e “morto sulla Croce” ci dice – afferma Benedetto XVI – che il posto giusto è quello vicino a Lui, “il posto secondo la sua misura”. E l’apostolo, in quanto inviato di Cristo “è l’ultimo nell’opinione del mondo”, e proprio per questo è vicino a Gesù:
    “Chi, in questo mondo e in questa Storia forse viene spinto in avanti e arriva ai primi posti, deve sapere di essere in pericolo; deve guardare ancora di più al Signore, misurarsi a Lui, misurarsi alla responsabilità per l’altro, deve diventare colui che serve, quello che nella realtà è seduto ai piedi dell’altro, e così benedice e a sua volta diventa benedetto”.
    E, dunque, qualunque sia il posto che la Storia vorrà assegnarci, quello che è determinante – sottolinea il papa emerito – è “la responsabilità davanti a Lui, e la responsabilità per l’amore, per la giustizia e per la verità”. Nel Vangelo di oggi il Signore ricorda che chi si esalta sarà umiliato e chi si umilia sarà esaltato. E Benedetto XVI fa notare che “Cristo, il Figlio di Dio, scende per servire noi e questo fa l’essenza di Dio” che “consiste nel piegarsi verso di noi: l’amore, il ‘sì’ ai sofferenti, l’elevazione dall’umiliazione”:
    “Noi ci troviamo sulla via di Cristo, sulla giusta via se in Sua vece e come Lui proviamo a diventare persone che ’scendono’ per entrare nella vera grandezza, nella grandezza di Dio che è la grandezza dell’amore”.
    Benedetto XVI fa dunque nell’omelia una catechesi sul senso dell’abbassamento di Cristo e sull’essenza dell’amore di Dio. “La Croce, nella Storia, è l’ultimo posto” e il “Crocifisso non ha nessun posto, è un ‘non-posto’”, è stato spogliato, “è un nessuno” eppure – nota Benedetto XVI – Giovanni nel Vangelo vede “questa umiliazione estrema” come “la vera esaltazione”:
    “Così, Gesù è più alto; sì, è all’altezza di Dio perché l’altezza della Croce è l’altezza dell’amore di Dio, l’altezza della rinuncia di se stesso e la dedizione agli altri. Così, questo è il posto divino, e noi vogliamo pregare Dio che ci doni di comprendere questo sempre di più e di accettare con umiltà, ciascuno a modo proprio, questo mistero dell’esaltazione e dell’umiliazione”.
    Infine il Papa emerito ricorda che Gesù esorta a “invitare” a prescindere dai vantaggi, cioè a invitare i paralitici, gli storpi, i poveri perché Lui stesso lo ha fatto invitando “noi alla mensa di Dio”, e in questo modo mostrandoci cosa sia la gratuità. Giustamente l’economia si poggia sulla “giustizia commutativa”, sul “do ut des”, ma perfino in questo ambito rimane qualcosa di gratuito, ricorda Benedetto XVI sottolineando che “senza la gratuità del perdono nessuna società può crescere”, tanto è vero che le più grandi cose della vita, cioè “l’amore, l’amicizia, la bontà, il perdono”, “non le possiamo pagare”, “sono gratis, nello stesso modo che in cui Dio ci dona a titolo gratuito”:
    “Così, pur nella lotta per la giustizia nel mondo, non dobbiamo mai dimenticare la ‘gratuità’ di Dio, il continuo dare e ricevere, e dobbiamo costruire sul fatto che il Signore dona a noi, che ci sono persone buone che ci donano ‘gratis’ la loro bontà, che ci sopportano a titolo gratuito, ci amano e sono buone con noi ‘gratis’; e poi, a nostra volta, donare questa ‘gratuità’ per avvicinare così il mondo a Dio, per diventare simili a Lui, per aprirci a Lui”.
    Quindi Benedetto XVI si sofferma sulla liturgia, sull’umiltà della liturgia cristiana che è insieme “incommensurabilmente grande” perché ci si unisce alle schiere degli angeli e dei santi nella festosa gioia di Dio. E il sangue di Cristo, che è al centro dell’Eucaristia, significa proprio “entrare nello splendore del raduno gioioso di Dio”. “Questo Sangue è il suo amore”, conclude Benedetto XVI. “È il Monte di Dio e ci apre alla gloria di Dio”.

    En todo, caridad

    Nobleza obliga. Siguiendo el compromiso de decir la verdad tal como la veo, comparto la alegría de leer esta entrevista al padre de la teología de la liberación, donde se muestra veraz, muy lejos de los planteamientos dialécticos de su primera obra.

    La historia de la Iglesia está llena de ejemplos hermosos de pensadores que, aun habiéndose desviado inicialmente, han manifestado su voluntad de unidad con el Papa. Y donde está Pedro, está la Iglesia católica.

    Observo con especial contento lo siguiente:

    a) Relativiza su propia teología como una entre otras muchas, para poner por delante el Evangelio,

    b) Afirma lo que los críticos católicos de la teología marxista de la liberación siempre dijeron: que la opción preferencial por los pobres, no exclusiva no excluyente, es exigencia del Evangelio y no de una teología particular solamente,

    c) Se niega a darle consejos por la prensa al Papa, que es la actitud más tradicional en la Iglesia (cosa distinta es opinar sobre la Iglesia), y

    d) No aparece por ninguna parte el materialismo tan llamativo en los discursos resentidos de los teólgos de la liberación de segunda clase.

    Naturalmente, conserva una contraposición un poco artificial, por cosas accidentales, entre este Papa y sus predecesores, pero eso está dentro de lo opinable. Le da el aire "progre" que tanto divierte, como el de los que creen que Juan XXIII era progresista, cuando era un tradicionalista de tomo y lomo, como puede ver cualquiera que lo lea. Tuvo la suerte de morirse antes de ver la destrucción de su liturgia, la liturgia tradicional romana, una destrucción que lo habría hecho llorar tanto como las herejías del posconcilio.

    Para mí, el complemento perfecto sería que Roma terminara la tarea y condenara claramente las obras que contenían esa teología de la liberación marxista, para que no se diga que fue una condena a espectros imaginarios, y para que nadie se tome todo lo que ha escrito el padre Gustavo como algo tan bonito como esta entrevista.

    Leed: primero, la entrevista; luego, un artículo que deslinda teología de la liberación marxista (en "El Jesuita" el Cardenal Bergoglio ya la daba por superada, no así la teología de la liberación que Roma ha pedido desde 1984 que sea llevada adelante en continuidad hermenéutica con la Tradición Apostólica).

    Entrevista:

    7/09/2013 

    Gutierrez: «Francesco mi ricorda Papa Giovanni»

    Rss Feed Twitter Facebook Print
    Il teologo Gustavo Gutierrez
    Il teologo Gustavo Gutierrez

    Intervista con il teologo domenicano esponente della Teologia della liberazione alla vigilia della presentazione a Mantova del libro scritto con l'arcivescovo Müller

    Angelo Sarto
    Mantova

    «Parlare dell'importanza del povero, della solidarietà con i poveri, … questo viene dal Vangelo. La teologia della liberazione tutto questo l'ha solo ricordato, non l'ha creato: c'è nel Vangelo! E il Papa è molto evangelico». Lo afferma uno dei fondatori della Teologia della liberazione, padre Gustavo Gutiérrez, domenicano, atteso domani al Festivaletteratura a Mantova insieme al suo “vecchio amico”, l'arcivescovo Gerhard Ludwig Müller, oggi Prefetto della Congregazione per la dottrina della fede.
     

    Padre Gutiérrez, l'ottima accoglienza manifestata da «L'Osservatore Romano»  al suo libro Dalla parte dei poveri (Edizioni Messaggero – Editrice Missionaria Italiana) www.emi.it , scritto insieme a mons. Müller, segna una svolta nei rapporti tra Vaticano e teologia della liberazione. Cosa ne pensa?


    «Questo libro è stato pubblicato in tedesco e spagnolo 9 anni fa. Sono molto contento di questa accoglienza positiva. Esso mostra che la teologia della liberazione è un contributo tra altre teologie. Monsignor Müller parla di questo molto chiaramente. Sono molto lieto per questa approvazione del mio vecchio amico Müller».


    Che rapporto esiste, per quanto lei sa, tra Bergoglio e la teologia della liberazione? C'è chi dice che l'ha condannata in passato ...

    «Che io sappia non l'ha mai condannata, me l'hanno detto alcuni miei amici che gli sono molto vicini. Guardi, io non sono tanto interessato alla teologia della liberazione ma al Vangelo. La teologia della liberazione è una teologia, pensata per ricordare qualcosa di importante del Vangelo: la presenza dei poveri nel mondo, l'opzione preferenziale per poveri da parte della Chiesa. Se ci sono stati contatti tra Bergoglio e la teologia della liberazione? Forse, perché no? Io preferisco vedere le cose così e non mettere il Papa in una teologia ma solo nel Vangelo».


    Qualche osservatore sostiene che Bergoglio stia portando avanti alcune istanze della Teologia della liberazione sul piano del suo impegno di pastore...

    «Forse credo che lui sta portando avanti il Vangelo, non esattamente una teologia, ma semmai una teologia vicina alla teologia della liberazione. Parlare dell'importanza del povero, dell'impegno, della solidarietà con i poveri, … questo viene dal Vangelo. La teologia della liberazione tutto questo l'ha solo ricordato, non l'ha creato: c'è nel Vangelo! E il Papa è molto evangelico, il suo modo di fare lo dimostra».
     

    Leonardo Boff ha sostenuto che papa Francesco porrà in futuro dei segni per riabilitare la teologia della liberazione, spesso criticata dal Vaticano. Secondo lei ciò avverrà?

    (Ride). «Fare previsioni è sempre difficile. Ma sembra che ciò possa avvenire, sebbene non posso dire come perché non posso rispondere a quello che farà il Papa. Ma questo momento è così ricco, interessante e evangelicamente nuovo! Spero che questo clima continui. Non tanto per la teologia della liberazione, ma per andare alla radice del vangelo. Non conosco Bergoglio direttamente, ma solo tramite amici che gli sono molto vicini. Ho sentito parlare di lui molto tempo fa come gesuita in Argentina, come vescovo, arcivescovo e cardinale a Buenos Aires. Sono molto lieto di questi mesi dopo l'elezione a Papa. Ha aiutato molto la fede con uno stile molto evangelico la vita della chiesa».


    Quale l'urgenza che Francesco deve affrontare di più nella chiesa di oggi?

    «Non è facile da dire, quando si vede la chiesa come papa si ha un altro panorama. Ma quello che ha fatto oggi è stato parlare del vangelo nella periferia è una metafora molto interessante. Questa è missione della chiesa: annunciare il regno di Dio a tutti, con un accento particolare nella periferia del mondo. Questo è quello che trovo così evangelico in Francesco! Le due cose che ha iniziato a fare, ovvero la riforma curia e la riforma economica dello IOR, sono quelle giuste. Ma sopratutto è interessante una presenza rinnovata della fede nel mondo di oggi. Lui ha un'analisi della realtà che mi sembra molto interessante. È molto originale e creativo nei gesti. Non posso dire: lui deve fare questo o quello! Non è mio compito. Però sono molto contento di vedere questa presenza e aria “fresca” nella chiesa che Francesco ha portato».


    Tante persone tornano alla Chiesa grazie a Francesco. Perché?

    «Ha toccato dei tasti che non era più toccati da tempo: l'evangelizzazione e l'annuncio del regno è per tutti. Questo vuol dire andare verso i punti importanti, ad esempio la giustizia. Francesco sta sottolineando molto questa novità, con un carisma veramente straordinario. Mi ricorda papa Giovanni XXIII».




    Artículo:

    09/10/2013 

    Papa Francisco y el "padre" de la teología de la liberación

    Rss Feed Twitter Facebook Print
    Gustavo Gutiérrez
    Gustavo Gutiérrez

    Según lo que ha anunciado el prefecto para la Doctrina de la fe, Müller, los dos latinoamericanos se reunirán dentro de poco

    Andrés Beltramo Álvarez
    Ciudad del Vaticano

    El Papa Francisco recibirá pronto a Gustavo Gutiérrez. Así lo anunció el amigo y más importante pupilo del "padre" de la teología de la liberación, Gerhard Ludwig Müller. El prefecto para la Doctrina de la Fe de la Santa Sede parece empeñado en lograr una "rehabilitación" definitiva para el teólogo sudamericano, tras décadas de polarización en torno a su figura y pensamiento.

    Gutiérrez se encuentra en Italia, donde presentó el domingo pasado su libro "De la parte de los pobres. Teología de la liberación, teología de la Iglesia" (Ed. San Paolo-Emi) en la Basílica de Santa Bárbara de Mantova. El texto, escrito a cuatro manos con el propio Müller, fue publicado por primera vez en Alemania en el año 2004 y ahora salió a la venta en Italia.

    Por ese motivo el diario del Vaticano, L'Osservatore Romano, dedicó al volumen varias páginas de su edición del 4 de septiembre. Reprodujo dos artículos de los autores y un comentario del franciscano Ugo Sartorio. Este último artículo sugirió que la llegada de Jorge Mario Bergoglio al papado debe marcar forzosamente un "rescate" de la teología de la liberación. Pero algunos de sus argumentos resultaron, cuanto menos, contradictorios.

    "Con un Papa latinoamericano, la teología de la liberación no podía permanecer, por largo tiempo, en el cono de sombra en el cual ha sido relegada desde hace algunos años, al menos en Europa", escribió Sartorio. Pero más abajo se contradijo, al recordar que el libro más importante de Gutiérrez, titulado "Teología de la liberación" y editado por primera vez en Lima (Perú) en 1971, para 1992 ya contaba con 10 ediciones.

    No obstante la hostilidad de algunos sectores, incluso de la misma Curia Romana, en realidad el pensamiento del religioso peruano y la teología de la liberación han gozado de una gran atención, no sólo en América Latina sino también en Europa. El interés y el constante apoyo brindado por Müller son un ejemplo tangible.

    En otro pasaje Sartorio (citando al padre Juan Carlos Scannone, jesuita y maestro de Bergoglio) sugiere que el Papa Francisco, "comparte" la corriente de la teología de la liberación argentina que "utiliza el método de 'ver-actuar-juzgar' y vincula la praxis histórica y la reflexión teológica, recurriendo a la mediación de las ciencias sociales y humanas".

    Pero, durante la conferencia de los obispos latinoamericanos en Aparecida (2007), el entonces arzobispo de Buenos Aires se mostró crítico con los límites de ese método. Una crítica que repitió en julio pasado, al reunirse con la comisión permanente del Consejo Episcopal Latinoamericano (Celam) en Brasil. En ese discurso advirtió sobre la tentación de "ideologizar el mensaje evangélico".

    Francisco puso como ejemplo a Aparecida y sostuvo: "En un momento (la cumbre de obispos) sufrió esta tentación bajo la forma de asepsia. Se utilizó, y está bien, el método de 'ver, juzgar, actuar' . La tentación estaría en optar por un 'ver' totalmente aséptico, un 'ver' neutro, lo cual es inviable. Siempre el ver está afectado por la mirada. No existe una hermenéutica aséptica. La pregunta era, entonces: ¿con qué mirada vamos a ver la realidad? Aparecida respondió: Con mirada de discípulo".

    Los esfuerzos del prefecto Müller por destacar la propuesta de Gutiérrez fueron interpretados como un intento por "rehabilitar" a su amigo. Es verdad que el religioso peruano nunca fue "condenado" por El Vaticano, pero sí es cierto que su pensamiento original provocó "ciertos abusos pastorales" producto de una "teología de la liberación mal entendida", como lo constató la Congregación para la Doctrina de la Fe el 27 de octubre de 1995.

    Roma pidió al autor corregir varios de los errores en sus obras con un artículo titulado "La Koinonía eclesial", que se envió a Roma en 1998 pero se publicó en 2004. Con esa reproducción El Vaticano dio por terminado el caso. Así las cosas, hoy por hoy Gustavo Gutiérrez no necesita rehabilitación alguna. Aunque pareciera. Tal vez se trate de un intento por "lavarle la cara" y permitir que sea incluido en la Comisión Teológica Internacional, ese organismo de la Santa Sede que reúne a los teólogos más destacados del mundo.

    miércoles, septiembre 11, 2013

    La virtud de ser sinceros: lo agradezco y felicito

    Un fenómeno penoso de los últimos meses es notar como, en diversos ambientes eclesiales, muchos se acercan con temor y reverencia a los jesuitas. Es que el Papa es jesuita, de donde parece que estos timoratos sacan la consigna de acercarse a quienes nunca habían seguido muy de cerca.

    Yo tengo un solo discurso: he conocido jesuitas muy papistas (especialmente en Estados Unidos, como Joseph Fesio) y otros que están confundidos, que atornillan al revés. Y entre estos algunos lo hacen abiertamente, a quienes uno les agradece la valentía y la sinceridad. Otros, que son la mayoría, enarbolan un doble discurso: en público alardean de fidelidad al Magisterio en la moral sexual, especialmente ahora en el asunto de la homosexualidad, mientras que en privado te reconocen que no ven nada malo en ese estilo de vida, al que acompañan con una pastoral que no se dirige a la conversión y a la castidad, sino a la acogida y la legitimación de un vicio abominable. Estos mentirosos dan pena y dan asco.

    En cambio, cuando un sacerdote dice abiertamente sus herejías, por lo menos le agradecemos ser bien hombrecito.

    Así que felicitaciones al Rector de la UC de Córdoba, en Argentina.

    Leed.

    Rector jesuita de universidad católica en Argentina apoya agenda gay y sacerdocio de mujeres

    Sacerdote jesuita Rafael Velasco
    Sacerdote jesuita Rafael Velasco

    BUENOS AIRES, 05 Sep. 13 / 06:09 am (ACI).- El sacerdote jesuita Rafael Velasco, rector de la Universidad Católica de Córdoba (UCC), en Argentina, dirigida por la Compañía de Jesús, expresó su aval al estilo de vida homosexual, demandó la aceptación de mujeres en el sacerdocio y aseguró que se adhiere a la teología marxista de la liberación.

    En una entrevista con el periodista argentino Mariano Saravia, con ocasión de su anuncio de renuncia al rectorado de la UCC que se haría efectivo en marzo de 2014, el Padre Velasco aseguró que en la Iglesia “hay reformas importantísimas que hacer”, entre ellas “que si un homosexual vive establemente con su pareja pueda comulgar”.

    El sacerdote jesuita señaló que si en la Iglesia Católica “decimos que no debe haber diferencias entre el hombre y la mujer, decimos que la mujer es importante, pero la excluimos del ministerio del sacerdocio. Eso tiene que cambiar”.

    En la entrevista, difundida a través de la página en la red social de Facebook de Saravia, el rector de la UCC dijo que “la corrupción está más clara en El Vaticano. La curia romana es una corte, la última corte medieval activa y viva en pleno siglo XXI. Eso tiene que desaparecer”.

    Además, pidió que en los nombramientos de Obispos, debe “participar más la comunidad”.

    A pesar de que el entrevistador le recordó que el Papa Francisco señaló que el tema del sacerdocio femenino fue zanjado por el Beato Juan Pablo II, el Padre Velasco dijo que el Santo Padre “lo podría abrir. No hay nada que no pueda abrir un Papa. Un Papa o un Concilio”.

    El sacerdote jesuita criticó la enseñanza de la Iglesia sobre la homosexualidad, comprendida en el Catecismo, que les pide a las personas con atracción al mismo sexo que sean “célibes y que no pueden vivir su amor y su sexualidad en toda la vida”.

    “No es lo mejor que tenemos para decirles”.

    “Yo creo que si sacamos conclusiones lógicas, a una persona que es homosexual y vive en las mismas normas de amor y fidelidad que les pedimos a los heterosexuales, deberíamos rehabilitarlo totalmente para los sacramentos, empezando por la comunión”, dijo.

    El rector de la Universidad Católica de Córdoba negó además el dogma de la infalibilidad del Papa cuando habla ex cathedra sobre doctrina o moral, definida en el Concilio Vaticano I.

    “Yo creo que ni los papas saben cómo sacarse de encima el dogma de la infalibilidad”, señaló.

    “Se debería democratizar la infalibilidad en temas de fe. Sería bueno discutirlo, pero no creo que Francisco lo vaya a discutir”, dijo.

    El sacerdote jesuita indicó su adherencia a la teología marxista de la liberación, “desde la realidad, leyendo la Palabra de Dios desde los pobres”.

    El Padre Rafael Velasco lamentó que “en la Iglesia todo el tiempo se hace política, y los únicos castigados son los Ernesto Cardenal o los Fernando Lugo”. Lugo, defendido por el rector de la UCC, recientemente tuvo que reconocer a su segundo hijo, concebido mientras aún era Obispo de San Pedro, en Paraguay.

    Ernesto Cardenal, sacerdote que se convirtió en revolucionario armado, fue reprendido públicamente por el Beato Juan Pablo II a su paso por Nicaragua.

    El sacerdote jesuita lamentó los “muchos años” de los pontificados de Juan Pablo II y Benedicto XVI, en los que, criticó, “en el nombramiento de obispos se privilegió a personas que interpretaban lo que decía Roma sin salirse del libreto”.

    El jesuita lamentó además que el Papa Francisco no haya recibido al teólogo marxista de la liberación Leonardo Boff a su paso por Brasil.

    Boff hace algunos años abandonó el sacerdocio, se casó, y se alejó de la Iglesia Católica para convertirse en lo que él llama un "ecoteólogo de matriz católica".

    Al final de su entrevista, el rector de la UCC pidió ser “cautos y realistas y contener el optimismo” con respecto al Papa Francisco pues “a pesar de que veo con esperanza las cosas que está haciendo y espero cambios concretos, no hay que perder de vista que Bergoglio nunca vio con simpatía la Teología de la Liberación. Esa es la verdad”.

    “Cuando lo eligieron en marzo lo primero que todos pensamos fue que era latinoamericano, y argentino. Pero no eligieron a Gustavo Gutiérrez (considerado el padre de la teología marxista de la liberación) para Papa”, lamentó.


    domingo, septiembre 08, 2013

    Sobre la teología marxista de la liberación

    Una entrevista clarificadora del 2005, ahora que la teología marxista de la liberación surge y se expande en formas nuevas (feminismo, diversidad sexual, etc.).

    Lo que conviene tener en cuenta, sobre todo, es lo que explicó J. Ratzinger a V. Messori, especialmente en el apéndice a ese libro entrevista ("Informe sobre la fe"): existe un doble discurso, que puede engañar a muchos, porque el lenguaje se mantiene parecido al catóilco, pero se le cambia internamente el contenido hacia el propio del marxismo, la lucha de clases, la interpretación materialista de la realidad.

    Leed.


    Los errores de la Teología Marxista de la Liberación

    Entrevista al Dr. Gustavo Sánchez Rojas
    Profesor de la Facultad de Teología Pontificia y Civil de Lima
    por Manuel UGARTE CORNEJO
    (FeyFamilia/25Set.05).
    —¿Qué es la Teología Marxista de la Liberación (TLM)?
    —La Teología de la Liberación en general, es una corriente teológica que tomando el tema bíblico de la liberación tal como aparece en el Antiguo y Nuevo Testamento (en el Éxodo, en San Pablo, etc.), busca una aplicación de las enseñanzas de la Revelación a las cuestiones sociales. Esto que en sí mismo es una cosa buena y valiosa.
    Pero hay muchas teologías de la liberación, y una de ellas toma como elemento hermenéutico el análisis marxista —lo que conocemos como el materialismo histórico—para poder interpretar la realidad social tan compleja y difícil que se vive sobre todo aquí en América Latina y para transformar esa misma realidad social. Ese tipo de pensamiento es el que ha recibido el nombre de Teología Marxista de la Liberación (TLM).
    —¿Cuáles son los principales errores en que incurre la TLM?
    —En primer lugar está el hecho de asumir que la teología —y son definiciones que ellos mismos dan— es la reflexión crítica sobre la praxis histórica a la luz de la Palabra. Eso significa que la teología ya no reflexiona sobre la Revelación, sino sobre el hecho concreto —que ellos llaman la praxis histórica— que es la lucha de los pobres y oprimidos por su liberación.
    Esta hermenéutica, esta metodología, ha sido juzgada por la Congregación para Doctrina de la Fe, en su Instrucción “Libertatis nuntius", como un error porque desde esa perspectiva lo que se está haciendo no es teología sino sociología religiosa (…), y seguramente el hecho de que la TLM se quede en un plano meramente político es uno de sus defectos principales.
    Lo segundo: el asumir el análisis marxista. Pienso que ese es el tema central y lo que trae esas desviaciones y riesgos de desviación “ruinosos para la fe y la vida cristiana” que también señalaba en su momento la “Libertatis nuntius”. Desde la asimilación del análisis marxista se reinterpreta todo lo cristiano y desde allí aparecen otra serie de problemas.
    —¿Cómo cuáles?
    —Por ejemplo, la salvación se interpreta como una realidad meramente horizontal con la consecución de una armonía que se queda en el plano político; Jesucristo es visto como un líder político, como un revolucionario, como un subversivo, así lo han llamado, y se pierde de vista su dimensión divina.
    Algunos teólogos de la liberación, a partir de estos supuestos, han afirmado que Jesucristo no es persona divina, sino que es simplemente un hombre en el cual Dios manifiesta su amor por los pobres, por los oprimidos. Cosa, que así tomada, es herejía.
    Hay un tercer aspecto en el cual, sobre una visión muy reductiva, la Iglesia es vista como el pueblo oprimido que lucha su liberación, se interpreta como “iglesia popular”, un nombre que se plasmó en la Nicaragua de los años '80, y que obviamente fue un experimento que fracasó; pero se entiende a la Iglesia como los que luchan por la liberación, por lo tanto quienes no participan de esa lucha no son iglesia, quedan de alguna manera excluidos lo cual lleva pues a un sectarismo.
    —¿Alguno más?
    En cuarto lugar, hay también todo un problema a la hora de entender qué cosa es la Eucaristía. Para ellos, la Eucaristía ya no es el sacramento que nos remite al sacrificio de Jesucristo en la cruz y su Resurrección, sino más bien un momento en que el pueblo oprimido toma conciencia de su opresión y de su lucha liberadora. La Eucaristía se convierte en un momento de concientización ideológica.
    Todo esto que estoy mencionando no es una apreciación particular, son los aspectos negativos señalados por la Congregación para la Doctrina de la Fe, en la instrucción que ya mencionamos, “Libertatis nuntius”, y que es la mejor síntesis de los aspectos negativos y erróneos de la TLM, con sus riesgos de desviaciones que son “ruinosos —dice así la instrucción— para la fe y para la vida cristiana”.
    Considerado uno de los padres de la TLM, Leonardo Boff abandonó el sacerdocio y se puso al margen de la Iglesia. Ahora se ha casado y no se reconoce como católico
    —¿Quiénes son sus representantes más importantes?
    —Los más importantes, o más conocidos por lo menos, son, aquí en Perú, Gustavo Gutiérrez; en Brasil, Leonardo Boff, Juan Bautista Libânio, Pedro Casaldáliga y Helder Cámara, los dos últimos obispos; en El Salvador está el jesuita catalán que se llama Jon Sobrino, en Chile el teólogo Ronaldo Muñoz, en Uruguay el jesuita Juan Luis Segundo. Son numerosos los pensadores que representan este tipo de corriente.
    —Gustavo Gutiérrez al definir la TLM, la presente como “la opción por los pobres”. ¿Acaso esta teología no pretendería responder también a una sana liberación de la situación de pobreza?
    —Efectivamente él habla de la “opción por los pobres” y dice que la Teología de la Liberación surge como un modo concreto de solidarizarse con los oprimidos. Y así entendido seguramente no habría mayor problema. La “opción por los pobres” es un elemento que los Obispos de América Latina en Puebla han presentado como fundamental para la Iglesia de nuestro tiempo.
    Pero la dificultad está en entender qué cosa significa "pobre" para la Teología de la Liberación, y en concreto para Gustavo Gutiérrez. Una revisión de sus principales libros, que son sin lugar a duda, "Teología de la liberación. Perspectivas", en su última edición del año 1988, y "La fuerza histórica de los pobres", muestra que para él "pobre" no es el humilde, el que confía en Dios, no es ni mucho menos el que nos presenta la Sagrada Escritura.
    "Pobre" para él es el oprimido, el proletario, y cito textualmente "La fuerza histórica de los pobres" en la pág. 79, el proletario —dice— que es explotado y que lucha justamente por su liberación. Para él “pobre” es el miembro de una clase social que está enfrentada y en lucha contra otra clase social explotadora y opresora.
    Entonces el problema no es la “opción por el pobre”, el problema es la concepción ideológica marxista que tiene él de "pobre". Esa es la dificultad.
    —En sus argumentos, los teólogos de la liberación llegan a citar documentos del Magisterio, citan encíclicas y documentos de las conferencias generales del episcopado latinoamericano. ¿Ello no es muestra de una preocupación por mantenerse fieles a la Iglesia o nutrirse de ella?
    —La cuestión no es tanto que citen. Citar está muy bien, el problema es cuál es la interpretación que ellos sacan de esas citas. La labor del teólogo es profundizar y continuar lo que el Magisterio va señalando, orientando, sugiriendo. En el caso de los teólogos de la liberación, una revisión de sus libros basta para darse cuenta que es al revés. Ellos exponen sus ideas con el apoyo de las así llamadas ciencias sociales y el análisis marxista, y a continuación viene la cita del Magisterio, de la encíclica, de algún obispo, en orden a refrendar lo que ellos ya han pensado. Quiere decir que en ese sentido hay una inversión completa de lo que debería ser una sana teología.
    El rostro ideológico y conflicto de la TLM
    —¿Algún hecho concreto que sirva para demostrar ese rostro ideológico, conflicto y hasta violento de la TLM?
    —Cuando en Nicaragua triunfa la revolución sandinista (con las ideas marxistas) en el año 1979, este país se convierte en una especie de terreno experimental de las ideas de la TLM. Allí se crea y organiza una “iglesia popular” que ha sido siempre el reclamo de teólogos como Gutiérrez o el mismo Boff, con todas las características que allí señalan: una iglesia que nace del pueblo, que es de los oprimidos que luchan por su liberación, una iglesia clasista —son palabras que usan ellos—, y una iglesia que en nombre de esta conciencia de clase se opone a la jerarquía.
    La iconografía de la TLM muestra su caracter ideológico, conflicto y violento. En Nicaragua el sacerdote Gaspar García murió peleando fusil en mano. En Perú la religiosa Nelly Evans formó parte de Sendero Luminoso
    —¿Otros casos?
    —Aún cuando no sea propiamente el caso de la TLM, porque es anterior, está el famoso sacerdote colombiano Camilo Torres, muy amigo de Gustavo Gutiérrez y, como él, también un gran admirador del marxismo y toda su teoría revolucionaria y clasista. Él ha sido uno de los muchos sacerdotes en América Latina que, lamentablemente, imbuidos de marxismo han abandonado su ministerio y han empuñado las armas para buscar supuestamente la justicia por medio de la fuerza.
    En Nicaragua hay otro caso muy conocido con el sacerdote Gaspar García Laviana, que es todo un símbolo para la revolución sandinista. Murió efectivamente peleando fusil en mano. Aquí en Perú, por ejemplo, y esto creo que todos lo conocemos, está la religiosa, que admiradora de todo este pensamiento liberacionista y marxista, se radicaliza, deja su congregación y termina formando parte del grupo terrorista Sendero Luminoso. Es la religiosa Nelly Evans Risco. Actualmente purga cadena perpetua.
    Ciertamente son casos tristes donde la ideologización lleva a los religiosos y sacerdotes, primero a la pérdida de su identidad como religiosos o como ministros. Y en segundo lugar, y más grave si cabe, a la pérdida de la fe.
    —Muchos de estos teólogos han recibido reconocimientos internacionales. Gustavo Gutiérrez fue galardonado con el premio Príncipe de Asturias, y recientemente ha sido nombrado Honoris Causa por una universidad en Chiclayo. ¿Ello significa que sus tesis siguen vigentes y tienen respaldo?
    —Yo personalmente creo que las tesis de la Teología de la Liberación están en un proceso de reformulación y de cambio, porque el hecho de que su estructura de base, que era el marxismo, ya no tiene ni la vigencia ni el protagonismo que tuvo hace unas décadas, ha obligado a que la TLM asuma nuevas formas sin abandonar los temas y los principios que estuvieron en sus orígenes.
    El hecho de que Gustavo Gutiérrez reciba un premio como el Príncipe de Asturias no le da valía teológica o religiosa a su pensamiento liberacionista (…). No es un reconocimiento a su carácter religioso ni mucho menos, ni tampoco a sus ideas cristianas o católicas. Es un reconocimiento a una labor que seguramente desde una perspectiva profana se considera válida: la cercanía con los pobres. Pero no es una especie de valoración ni de la teología, con toda seguridad, ni tampoco de su vivencia cristiana personal.
    —¿La TLM ha muerto o ha cambiado de estrategia?
    —Yo pienso que no ha muerto, pero sí está bastante venida a menos. Ya no tiene toda la atención que antes se le prestaba. La TL efectivamente está proyectándose en otras alternativas teológicas como medio de mantener una presencia. Tenemos a la “teología india” sobre todo en México y Brasil, que se inspira en toda la reivindicación propuesta por la TL.
    Están también las diversas “teologías feministas” que han recogido de la TL la dialéctica del opresor-oprimido. Y en algunos casos también se plantea la existencia de una “eco-teología” que es un sincretismo entre teología y ecología, en orden a que la tierra también es una oprimida por la actividad destructora y avasalladora del capitalismo o del neoliberalismo.
    Son instancias que de alguna manera mantienen todavía con cierta vigencia a la TL, pero que ya se apartan un poco de lo que fue la TL en su momento más clásico.
    —¿Ya no es tan peligrosa como hace unas décadas?
    —El problema está en que las cosas erróneas que señaló la TLM no han sido rectificadas. Sus autores en general no han rectificado prácticamente nada de lo que han dicho y si bien es verdad que ahora tocan otro tipo de temas, rectificación de los puntos equivocados que se vieron en los comienzos no ha habido. Eso es lo peligroso.
    —¿Si la opción por los pobres no es esta TLM, cuál es entonces?
    —La opción por los pobres es la que la Iglesia practica desde Jesucristo, que ha seguido practicando a través de los padres de la Iglesia, a través de sus santos, y que se plasma también en la vida cotidiana y concreta de la Iglesia en todo el mundo y en América Latina.
    Todos los días y en todas partes, nosotros podemos ver religiosos, laicos, que comprometidos con su fe van, y de manera silenciosa y discreta, en una forma muy sencilla y humilde, ayudan a los más necesitados, se dedican en cuerpo, alma y espíritu a los más pobres, ponen en juego incluso su vida para atender a aquellos que son los más desposeídos.
    Yo pienso que esa es la verdadera opción por los pobres, una opción por los pobres que se basa en Jesucristo y en el Evangelio y no en alguna ideología o algún préstamo de tipo político o sociológico.
    Pienso por ejemplo en la Madre Teresa, en las religiosas de la Caridad, pienso en las obras solidarias de Mons. Ricardo Durand, en esas personas maravillosas que son efectivamente la manifestación más elevada de que la opción por los pobres es un elemento que se practica siempre por personas de fe que están dedicadas íntegramente a servir a los pobres porque en ellos ven a Jesucristo.
    La Iglesia a lo largo de su historia ha propuesto un camino que lleva justamente al compromiso social que brota de la Revelación, y de las enseñanzas de la Tradición y del Magisterio, y que además es eficaz, y bien aplicado podría ser un excelente medio de renovación y recuperación de las realidades temporales, con espíritu y con identidad cristiana y católica, y esa es la Doctrina Social de la Iglesia.
    —¿Gustavo Gutiérrez se reconcilió con la Santa Sede?
    —Gustavo Gutiérrez en sus libros no ha modificado prácticamente nada de su planteamiento marxista. Por eso el Card. Ratzinger dijo que en su caso hay muchas cosas que necesitan ser rectificadas.
    —El premio Príncipe de Asturias destacó que Gustavo Gutiérrez ha conseguido "mantenerse al margen de los radicalismos en que se han visto envueltos otros teólogos".
    —Es verdad que él no ha tenido el final tan problemático que han tenido otros como Boff, o quizá otros que incluso han llegado a un camino mucho más extremo, en ese sentido habrá que reconocer que ha mantenido su presencia como sacerdote y como católico.
    —¿En esa línea ya Gutiérrez aceptó las observaciones y aclaraciones necesarias para superar sus problemas con el Vaticano? ¿Cuál es su situación actual con la Santa Sede?
    —Allí hay un problema que ciertamente no está resuelto. Y me remito a los libros de Mons. Ricardo Durand, quien ha sido uno de los críticos más agudos y lúcidos del pensamiento de Gustavo Gutiérrez en lo que tiene de ideológico, de marxista y de radical. Al abordar el hecho del nuevo discurso moderado de Gutiérrez, Mons. Durand explica que ese cambio, esa posición nueva, que es loable, es insuficiente porque no ha corregido sus planteamientos originales.
    En la edición de su libro “Teología de la Liberación” del año 1988, teniendo ya a la mano los criterios ofrecidos por las instrucciones de la Congregación para la Doctrina de la Fe, Gutiérrez no modifica prácticamente nada de su contenido que es claramente marxista, ideológico y que merece todas las críticas que se le han hecho.
    Y podemos remitirnos también al libro entrevista “La sal de la tierra” en donde el Cardenal Joseph Ratzinger, hoy Papa Benedicto XVI, en el momento en que le preguntan sobre la TLM, él responde que efectivamente, en el caso de Gustavo Gutiérrez ha habido un cambio, pero —dice el Cardenal— hay muchas cosas que necesitan ser rectificadas.
    —Por lo menos en los medios de comunicación su discurso es bastante moderado y llega a afirmar que la liberación que propone la TL no se relaciona con la violencia. Y eso no suena marxista.
    —Indudablemente que no, pero si esto es así, si esto es lo que Gustavo Gutiérrez hoy en día piensa, entonces la pregunta es por qué no rectifica las cosas que sí están todavía en sus libros y que son completamente marxistas y radicales. Hay una especie de doble discurso porque lo que queda en sus libros él no lo ha cambiado, no lo ha modificado a pesar de las indicaciones expresas que se le ha hecho por parte de la Congregación para la Doctrina de la Fe, es decir por el Card. Ratzinger. No ha cambiado todas aquellas cuestiones que son problemáticas.

    Persecución contra la familia de verdad

    Una familia de verdad: papá y mamá que educan a sus hijos. ¿Qué puede hacer el Estado contra esa amenaza? Perseguirla por la fuerza. Se reportan casos en Alemania y en Suecia. Veremos si la Corte Europea de Derechos Humanos los defiende.

    Leed, del blog pertinatious papist:





    20 German police, agents, storm home, remove homeschooled children by force

    "Police storm homeschool class, take children by force" (WND, August 30, 2013): "Officers brought a battering ram and were about to break door in." Clearly someone believes home schoolers qualify as something about as alarming as terrorists:

    “The children were taken to unknown locations,” HSLDA said. “Officials ominously promised the parents that they would not be seeing their children anytime soon.”

    The raid, which took place Thursday at 8 a.m. as the children were beginning their day’s classes, has been described by observers as “brutal and vicious.”

    A team of 20 social workers, police and special agents stormed the family’s home. HSLDA reported a Judge Koenig, who is assigned to the Darmstadt family court, signed an order authorizing the immediate seizure of the children by force.

    “Citing the parents’ failure to cooperate ‘with the authorities to send the children to school,’ the judge also authorized the use of force ‘against the children’ … reasoning that such force might be required because the children had ‘adopted the parents’ opinions’ regarding homeschooling and that ‘no cooperation could be expected’ from either the parents or the children,” HSLDA said.

    jueves, septiembre 05, 2013

    Alain Delon

    Sin comentarios. Yo sabía que era macho. Ahora veo que es valiente.

    Leed


    Famoso actor francés rechaza adopción gay y defiende auténtico matrimonio

     
    PARÍS, 05 Sep. 13 / 05:53 pm (ACI/EWTN Noticias).- El famoso actor francés Alain Delon, calificó las relaciones homosexuales como “contra natura” y aseguró su oposición a la adopción por parte de parejas del mismo sexo.

    En declaraciones al programa “C à vous”, de France 5, el actor de 77 años señaló que los hombres “estamos aquí para amar a una mujer, para cortejar a una mujer, no para seducir o dejarse seducir por un tipo".

    El actor remarcó que no tiene ninguna aversión contra las personas homosexuales, señalando que el “que se casen entre ellos me da completamente igual”.

    “Lo que no quiero es que adopten", subrayó.

    “Ya no hay diferencia, ya no hay respeto, siento mucho decirlo así", señaló.

    Delon también se refirió a la masculinización que le parece que está sufriendo la mujer, pues “sé que dicen que cada vez hay menos hombres... Hay menos porque cada vez hay más mujeres que se convierten en hombres".

    En una entrevista anterior al diario Le Figaro, Delon ya había expresado su crítica al estilo de vida gay, confesando que “vivo muy mal esta época en la que se banaliza algo que es contra natura”, refiriéndose a las relaciones homosexuales”.

    El rechazo a la adopción gay en Francia ha sido masivo, llegando a colmar con millones de manifestantes, en distintas oportunidades, las calles de París.

    Nathalie de Williencourt, lesbiana francesa y una de las fundadoras de una de las asociaciones de gays más grandes de Francia, Homovox, aseguró a inicios de 2013 que la mayoría de homosexuales, incluida ella misma, no quieren ni el matrimonio ni la adopción de niños.