Páginas

jueves, diciembre 01, 2011

Académicos UC: mienten y persisten en mentir

Un grupo de académicos se apropia de la representatividad UC. Son activistas políticos de izquierda, que apoyan a la FEUC de izquierda, y que han tratado recientemente de linchar al profesor Gonzalo Rojas por sus opiniones de derecha.

Ellos plantean la cuestión, por tanto, de la repolitización de la UC. Los otros académicos ya no pueden quedarse en la neutralidad total, especialmente si entre los "académicos UC" hay quienes NO comparten la doctrina católica, pero SÍ utilizan el cristianismo como medio de argumentación en cuestiones opinables.


¿No hay forma de pararles el carro? ¿Son los nuevos dueños de la Universidad? ¿Le pasará a la Iglesia lo que en otras partes, que ha perdido sus universidades a manos de agitadores?

Les copio la respuesta que le dieron a Gonzalo Rojas para que se vea cómo manipulan los hechos y qué determinados están a atacar a sus adversarios.

Réplica a Gonzalo Rojas

noviembre 30, 2011
Estimado profesor Rojas:
1. Nuestra declaración se refiere a Ud. personalmente y está firmada por sus autores y adherentes, que es lo propio de la vida civilizada. Si de diálogo se trata, Ud. no habría publicado una opinión para ser leída por millones de anónimos ciudadanos.
2. Cuando alguien expone sus opiniones en un medio público y masivo, es legítimo que se le emplace por la misma vía.
3. Del mismo modo, una vez publicada una opinión, no es necesaria advertencia alguna para contestar. ¿O acaso habría que pedir alguna autorización?
a. Nadie se arroga nada, excepto ejercer el mismo derecho que Ud.: publicar una opinión, la que en este caso importa una enérgica condena. El término “condena”, convendrá Ud., no tiene necesariamente connotaciones judiciales, aunque sí éticas y morales.
b. El lenguaje descalificador es consecuencia de su propia entelequia, repleta de sofismas, puesto que al justificar crímenes de sangre (cometidos, ocultados o ignorados por quienes Ud. aparenta apoyar), haciendo recaer la responsabilidad de esas depravaciones en las propias víctimas (sin hipócritas comillas), quienes pudieron ser juzgadas y castigadas con apego al derecho, incurre Ud. en una doble falta, inexcusable en un abogado cristiano.
c. Por lo anterior, no hay distorsión alguna en nuestra lectura: Ud. efectivamente hace una apología de la muerte de miles de chilenos, con el agravante de confundir grupos de resistencia armada con los miles de ciudadanos comunes (campesinos, jóvenes, mujeres) que enfrentaron tortura o encontraron la muerte.
4. Celebramos que ahora, después de haber publicado su opinión, esté Ud. dispuesto a iniciar un diálogo racional.
a. Hemos leído su columna con el mayor rigor. Usted, en cambio, omite en su argumento los métodos represivos de la dictadura, reñidos con el honor militar, con las convenciones internacionales de guerra y con los principios más elementales del justo proceso, incluida la “desaparición” de cadáveres para evitar dar cuenta de la arbitrariedad y la crueldad. Como abogado y profesor titular, ¿por qué no se refiere a este particular aspecto de la eufemística “guerra” que Ud. denuncia?
b. Ya que Ud. no consideró pertinente invocar su propia obra en dicha columna de opinión, tampoco es del caso que nosotros recurramos a ella. Lo que aquí se comenta es un breve escrito suyo publicado en un periódico.
c. No tenemos intención de analizar su próxima obra, a no ser que la reproduzca en la prensa.
d. En una universidad que se precie de tal, todos tienen derecho (deber, en realidad) de investigar y fijar postura, y todas las opiniones están sujetas a debate. Otra cosa es reaccionar a un texto hecho público.
5. Finalmente, en respuesta a sus comentarios personales:
a. Nos alegra que no nos guarde rencor, que es cosa muy mala. Es paradójico, sin embargo, que Ud. nos declare su perdón, cuando los ofendidos en carne viva somos nosotros. Ese recurso retórico es conocido como Falacia del Victimismo.
b. Hacemos un público reconocimiento a los cientos de profesores de esta gran universidad que han adherido al repudio a su columna de opinión. Igualmente felicitamos a la FEUC (recién electa democráticamente) por su inmediato y similar repudio. Todos estamos atentos a la defensa de nuestras libertades y, muy particularmente, de la verdad.
Carlos Aguirre, Escuela de Construcción Civil
Francisco Albornoz, Escuela de Teatro
Eduardo Agosín, Facultad de Ingeniería
Lorena Amaro, Instituto de Estética
Soledad Aravena, Facultad de Letras
Carolina Becerra, Facultad de Matemáticas
Javier Cancino, Escuela de Diseño
Andrea Chignoli, Facultad de Comunicaciones
José Pablo Concha, Instituto de Estética
Marcela Cornejo, Escuela de Psicología
Mauricio Cortés, Instituto de Música
Felipe Court, Facultad de Ciencias Biológicas
Patricio Cumsille, Escuela de Psicología
Joaquin De Cea, Facultad de Ingeniería
Rodrigo De la Iglesia, Facultad de Ciencias Biológicas
Claudia Drago, Facultad de Educación
Patricia Espinosa, Instituto de Estética
Paula Errázuriz, Escuela de Psicología
Angélica Farías, Escuela de Enfermería
Eduardo Fermandois, Instituto de Filofofía
Luis Flores, Facultad de Educación
Xavier Figueroa, Facultad de Ciencias Biológicas
Gisela Frick, Facultad de Arquitectura
Ricardo Fuentealba, Escuela de Arte
Daniela Fuentes, Escuela de Enfermería
Gonzalo Gallardo, Escuela de Psicología
Eugenio Garcés, Escuela de Arquitectura
Ricardo Giesen, Facultad de Ingeniería
Milena Grass, Escuela de Teatro
Sebastián Gray, Escuela de Arquitectura
Carlos González, Facultad de Letras
Sergio Gutiérrez, Facultad de Ingeniería
Rocío Hidalgo, Facultad de Arquitectura
Loreto Holuigue, Facultad de Ciencias Biológicas
Pablo Julio, Facultad de Comunicaciones
Andrés Kalawski, Escuela de Teatro
Mariane Krause, Escuela de Psicología
Edmundo Kronmuller, Escuela de Psicología
Ana María Leñero, Facultad de Física
Gloria Martínez, Escuela de Teatro
Patricio Miranda, Escuela de Trabajo Social
Cristián Morales, Instituto de Música
Germán Morales, Escuela de Psicología
Felipe Moreno, Facultad de Letras
Andrés Moreira, Instituto de Geografía
Carmen Olivari, Escuela de Psicología
Cristián Opazo, Facultad de Letras
Juan de Dios Ortúzar, Facultad de Ingeniería
Marcela Oyadenel, Facultad de Letras
Olof Page, Instituto de Filosofía
Rodrigo Pérez de Arce, Facultad de Arquitectura
Carlos Portales, Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas
Patricia Raquimán, Facultad de Educación
Rolando Rebolledo, Facultad de Matemáticas
Carolina Rojas, Escuela de Trabajo Social
Diego Romero, Facultad de Física
Gabriela Rubilar, Escuela de Trabajo Social
Cristián Salas, Facultad de Química
Olaya Sanfuentes, Instituto de Historia
Daniela Serra, Instituto de Historia
Mike van Treek, Facultad de Teología
Laura Valledor, Facultad de Educación
Rodrigo Varas, Facultad de Ciencias Biológicas
Ruby Vizcarra, Facultad de Educación
Pablo Whipple, Instituto de Historia
Mi reconocimiento es a estos profesores por ser abiertos, dar la cara y sus nombres, sostener sus errores con confianza, y permitirnos la legítima defensa. No reconozco a ninguno de ellos como alguno de los que han salido a defender las posiciones de la Iglesia católica en el debate público: en ninguno de los asuntos que hemos debido debatir en los últimos veinte años.

NUNCA.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario