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jueves, septiembre 06, 2012

Defensa del ranking

Una carta en defensa del ranking en el colegio. De un ranking de verdad, sin emborronarlo con sentimentalismo.


El Mrecurio
Cartas
Jueves 06 de Septiembre de 2012
 

Ranking y méritos

Señor Director:


Don Francisco Javier Gil sostiene una posición voluntarista e irracional sobre el ranking de notas en su carta del pasado lunes.

Es voluntarista, en primer lugar, porque expone su alambicada fórmula para el cálculo del ranking y de ahí concluye que la "posición relativa" de dos alumnos en distintos establecimientos "no aparece en esta fórmula porque así lo decidimos sus creadores hace muchos años".

¿Y qué? La "posición relativa" es un asunto objetivo, matemático: uno es primero o decimocuarto en su curso, pertenece al 1% mejor o al 40% mejor o es el peor de su curso. De manera que la "posición relativa" existe con independencia de que nuestros expertos en educación, en admisiones, en selección y, ahora, en inclusión, no quieran hacer uso de ella.

Los expertos fueron adelante con la PSU contra todas las advertencias de verdaderos sabios, como Gonzalo Vial Correa, y ahora continuarán contra viento y marea "porque así lo decidieron hace muchos años".

La decisión adoptada es, además, irracional por sentimental. La sociedad es efectivamente competitiva y el mercado es ciertamente cruel. A los niños se les adelanta su maduración en todo tipo de asuntos, pero solamente en esto, en que aprendan a competir por los mejores lugares relativos de su curso, nuestros expertos nos dicen que "no queremos exacerbar el individualismo que sufre nuestra cultura".

Por el contrario, pienso que premiar el mérito individual no es fomentar el individualismo. Impulsar el esfuerzo por ser mejores dentro de un curso, de una manera que cualquier hijo de vecino puede comprender, es fundamental para promover una cultura del esfuerzo, de la excelencia, de la virtud académica.

Yo he apoyado siempre un ranking de notas, pero no una fórmula que lo distorsione con una falsa promesa de inclusión.



CRISTÓBAL ORREGO SÁNCHEZ
Profesor de Derecho
Universidad Católica

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